Gerald Hernández / LBPN
Por segundo duelo consecutivo, un swing en el cierre de
juego acabó una gran batalla. Una noche atrás, Manuel Geraldo se voló la cerca
en el octavo inning para un triunfo 1-0 y ahora fue el turno de Novoa, como
complemento a una espectacular faena de pitcheo de ocho episodios de Luis
Ramírez, más el taponeo de Olbis Parra.
El Bóer ganó la Serie Final cuatro juegos a dos y está en la
cima por primera vez en ocho temporadas, cortando un largo ayudo para
conquistar su sexta corona, que lo dejan como la franquicia con más títulos en
la historia de 18 años de la LBPN, dejando atrás a los Leones de León, los que reúnen
cinco campeonatos.
El dominicano Ramírez se volvió a exceder en la colina, con
ocho entradas de tres hits, dos carreras, cuatro bases y 11 ponches, en una agotadora
jornada de 115 lanzamientos, convertido en un roble de la vieja época, mientras
que Parra se encargó del cierre de forma magistral, alargando a 15.1 episodios
su brutal cadena de innings sin admitir anotaciones, volviéndose
silenciosamente en un factor de garantía.
Ramírez fue además el ganador en el segundo juego de la
serie, con otra extraordinaria presentación de ocho ceros, así que no hubo discusión
acerca de su nombramiento como el Jugador Más Valioso de la Serie. En total,
tuvo balance de 2-0, efectividad de 1.13, con seis boletos y 15 ponches en 16
entradas y solamente seis hits en contra en una abrumadora demostración de dominio.
El Bóer ha sido un equipo implacable en finales, ganando por
sexta vez en siete apariciones, mientras que los Gigantes continúan teniendo
problemas para dar el paso final, porque aunque han llegado a ocho series
finales, solamente registran tres coronas.
Ramírez eclipsó nuevamente a su paisano Gerson Garabito,
quien en el seis innings recetó 12 ponches y permitió dos carreras para salir
sin decisión en el encuentro. El perdedor fue el relevista Víctor Capellán,
quien en medio de dificultades pintó ceros en los episodios 7 y 8, pero en el
noveno dio boleto a Geraldo y enseguida Novoa lo sonó con un batazo que se
estrelló justamente en la torre que divide en territorio bueno del foul por el
jardín izquierdo.
El Bóer abrió el marcador con dos carreras en el tercer
inning, logrando descifrar a Garabito. Javier Robles prendió la mecha con hit,
Rubí Silva se sacrificó y Aldo Espinoza siguió con otro imparable. Geraldo
impulsó la primera con un sencillo al bosque derecho y con corredores en las
esquinas, Novoa dio un machucón por la primera base, Ofilio Castro lo atacó
bien, pero hizo un mal tiro al plato, permitiendo la anotación de Aldo.
Los Gigantes respondieron de inmediato con imparable de
Rafael Estrada y boleto a Iván Marín, más toque de sacrificio de Isaac Benard y
elevado a los jardines empujador de carrera de Rogearvin Bernadina. Wuillians
Vásquez negoció boleto y Jesús Valdez falló con dos corredores a bordo, aunque
al menos los rivenses se acercaron 2-1.
El marcador se mantuvo así, hasta que en el sexto, Vásquez
conectó doble y Valdez lo impulsó con triple, quedando a 90 pies la carrera de
la ventaja. Cheslor Cuthbert fue boleado intencionalmente y Ramírez se creció
en la colina abanicando a Brandon Leytón y dominando en rola al cuadro a Ofilio
Castro.
Esa falta de productividad fue grave, porque Ramírez tomó un
segundo aire y retiró a los últimos ocho bateadores que enfrentó y Parra también
llegó cuchillo y extendió esa cadena a 11 dominados en fila, para ponerle punto
final al juego y el campeonato.
Para el mánager del Bóer, el boricua Joel Fuentes, fue su segundo título. El primero lo logró con los Gigantes en la temporada 2020-21, mientras que el canalero Lenín Picota pierde la serie final por tercera vez, aunque también tiene dos títulos conquistados con los Tigres de Chinandega. Esta pareja de estrategas y el cubano Germán Mesa son los mánagers importados con más coronas en la LBPN, aunque Fuentes y Picota residen en nuestro país. El legendario Noel Areas y Sandor Guido son los más ganadores con tres campeonatos cada uno.
La temporada 2021-22 de la LBPN será recordada como la más competitiva hasta el momento. La primera ronda del torneo tuvo a todos los equipos en la pelea hasta la última semana, en el Round Robin se conoció a los finalistas hasta en el último día y la Serie Final se fue a seis juegos, cuatro de ellos peleados de inicio a fin, con el Bóer superando cada etapa contra pronósticos, hasta coronarse.