Gerald Hernández
¿Cuántos bateadores serían capaces de tomar su último turno
al bate sabiendo que tienen en su poder la triple corona de bateo de la liga y
que si fallan pierde una de ellas y se olvidan de la hazaña? Al menos tenemos
la certeza de uno: Raudy Read.
El ex bigleaguer dominicano de los Gigantes de Rivas llegó a batear al octavo inning del último juego del Round Robin con las coronas de jonrones (11) y empujadas (36) aseguradas, pero el liderato de bateo corriendo peligro. Su promedio de .379 superaba por diezmilésima al de su paisano y compañero de equipo Francisco Peguero, quien batea antes que él en el lineup y acababa de ser dominado.
Sin embargo, Read se olvidó de estrategias, quería ganar la
triple corona de la forma más legítima posible y se encaminó al cajón de bateo,
y chocó bien la pelota, pero una buena jugada del inicialista Norlando Valle le
robó el hit que lo hubiera metido en la historia de la Liga de Beisbol
Profesional de Nicaragua, como el tercer ganador de la triple corona de bateo,
uniéndose a Yurendell de Caster y Wuillians Vásquez.
“Le doy gracias a papa Dios por la clasificación del equipo
a la Serie Final y por los números personales. Si no gané el liderato de bateo y
lo ganó otro, era la voluntad de Dios”, apuntó humildemente Read al periodista rivense
Carlos Chavarría en una entrevista después del juego.
Peguero con promedio de .379 se convierte en apenas el
segundo dominicano campeón de bateo de la LBPN. El primero fue José Campusano
con el Bóer en la campaña 2010-11. Además, el ex patrullero de los Gigantes de
San Francisco en la MLB, fue también el número uno en hits (67) y anotadas
(40).
Read se quedó con el título de jonrones, remolques y dobletes
(12), uniéndose al grupo compuesto por Marlon Abea, Clyde Williams y Wuillians
Vásquez como ganadores de estos tres lideratos al mismo tiempo.
El boricua Enmanuel García y el pinolero José Saúl Orozco
finalizaron empatados en la cima de triples con cuatro cada uno. Es el primer
liderato en la carrera de Orozco.
En tanto, Jairus Richards estableció un récord para la LBPN
con 25 robos, borrando la marca de 22 de Campusano en 2010-11 y el Tren de
forma colectiva también impuso una marca con 66 estafas, superando por mucho
las 51 del San Fernando en el 2005-06.
LOS MEJORES EN PITCHEO
El dominicano Jesús Linárez, de los Leones, registró la
mejor efectividad con 2.31 y también fue el más difícil de conectar con un
promedio de bateo en contra de .220. El relevista Yeris González lanzó 31.1
entradas, quedando a 3.2 innings de ser elegible a ganar esta corona con su brillante
efectividad de 1.72.
El también dominicano Luis Ramírez, del Tren, ganó ocho juegos,
que es la mayor cifra de victorias de las últimas ocho temporadas.
Yoanner Negrín fue el máximo ponchador con 54 y desde la
primera temporada (2004-05), cuando Miguel Pérez impuso un récord con 99
abanicados, ningún cubano había ganado este liderato. Negrín fue también el
tirador más durable con 71.1 entradas recorridas y el que más inicio partidos
con 12.
Los dominicanos Samuel Adames, de los Gigantes, y Euclides
Leyer, de los Tigres, compartieron el liderato de juegos salvados con seis cada
uno.